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En un contexto social y económico complejo, la sociedad se
encuentra inmersa en un debate crucial en el marco del balotaje.
Los profesionales de la salud no podemos evitar contemplar el
futuro en función de nuestro trabajo, ya que las propuestas
electorales tendrán un impacto significativo en nuestro sector.
Podemos decidir nuestras preferencias por una variedad de
motivos ajenos al ámbito de la salud, pero es de vital
importancia profundizar en las propuestas de ambas alternativas
electorales, en particular, en lo que respecta al capital humano
en salud, ya que esto afectará directamente a nuestro porvenir.
La información disponible sobre las posturas en materia de salud
es limitada, dado que el tema estuvo notablemente ausente del
debate presidencial, y los referentes de salud de los candidatos
que compitieron en las elecciones generales se vieron opacados
por los equipos económicos.
Solo pudimos obtener fragmentos de su perspectiva en algunas
notas periodísticas y foros. Sin embargo, todos coinciden en un
diagnóstico evidente: el sistema de salud está fragmentado, la
accesibilidad es reducida y el recurso humano se encuentra en
crisis.
De lo poco que sabemos, destaca la atención que los referentes
de los candidatos han prestado a las residencias médicas. En una
entrevista realizada por Fabiola Czubaj en La Nación (1), tanto
el referente de La Libertad Avanza como el de Unión por la
Patria se refirieron a este aspecto.
El primero se centró en un análisis de la calidad y planteó la
necesidad de revisar los programas de formación, con un enfoque
en la efectividad de los graduados, orientando el perfil a las
demandas del sistema.
Sin embargo, este enfoque plantea un dilema delicado, ya que
centrarse en la demanda especializada podría descuidar la
atención primaria de la salud, un componente esencial de
sistemas de atención eficaces en todo el mundo.
Además, la propuesta de un programa de incentivos carece de una
orientación clara u objetivos específicos, lo que podría
resultar ineficaz en un contexto inflacionario. En resumen, la
mirada del capital humano en formación, dada la información
disponible, si bien no parece estar fuertemente vinculada a
principios libertarios carece de consistencia.
El resto de la propuesta de La Libertad Avanza se alinea más con
un enfoque liberal, destacando la libre elección de los usuarios
y la competencia entre obras sociales, el sector público y
privado. No obstante, la viabilidad de estas propuestas en el
corto plazo, en el actual contexto de regulaciones y
financiamiento, es incierta.
La definición de una canasta de prestaciones, la apertura a
evaluaciones de calidad y la convocatoria a expertos y actores
del sistema aparecen como aspectos más prometedores. Pero todo
esto no puede desprenderse del conjunto de políticas que
promovería el nuevo gobierno de la que se tienen pocas certezas
y muchos temores.
La propuesta presentada por el referente del oficialismo también
reconoce la crisis del personal de salud, aunque no toma
posición respecto de las responsabilidades que le corresponden
al Gobierno en dicha crisis.
En cuanto al capital humano, el oficialismo parece estar
dispuesto a mantener algunas políticas que se han convertido en
políticas de Estado a lo largo del tiempo. En este sentido, ya
está impulsando una ley de residencias que cristaliza algunos de
estos aspectos, como el reconocimiento de la condición laboral
del residente.
Se menciona la integración entre la residencia y la práctica
final obligatoria del grado, lo que supone, por un lado, una
mayor vinculación entre la universidad y las residencias, y por
otro, la continuidad de las políticas iniciadas antes de 2019
durante la gestión de Rubinstein.
También se propone un sistema de incentivos para especialidades
críticas y la asignación de recursos para mejorar la cobertura
en áreas con escasez de profesionales de la salud. Este enfoque
parece centrarse en la equidad y la accesibilidad, la
potenciación de enfermería y obstetricia con roles más amplios
en la atención de salud sugiere una posible complementación.
No queda claro de donde procederían los recursos para financiar
esta propuesta, sin aumentar el déficit fiscal. Finalmente, al
igual que su competidor, el oficialismo aboga por incentivos
económicos y la garantía de ingresos para reducir el multiempleo
y la dispersión de médicos en múltiples lugares con condiciones
laborales precarias.
No obstante, no contamos con información concreta sobre cómo se
modificaría el contexto de fragmentación, la falta de
articulación entre niveles y la superposición de prestadores.
Principales causantes de la situación que se busca corregir.
En resumen, si bien existe un reconocimiento evidente de los
problemas del sistema de salud y del capital humano, resulta
difícil pensar que cualquiera de las medidas propuestas pueda
ser efectiva a largo plazo sin un cambio en el contexto y con la
macroeconomía volátil que empeoró desde que el actual candidato
es ministro de Economía.
Dada la crítica situación del sistema, parece que un cambio en
los aspectos del modelo de financiamiento, gestión y prestación
resulta fundamental para generar políticas de capital humano que
puedan mantenerse en el tiempo.
Sin mensajes claros, cualquiera sea el nuevo gobierno enfrentará
una crisis de salud que se agravará, y los profesionales
continuaremos padeciendo los males que nos vienen aquejando
desde largo tiempo.
Referencias
1 Czubaj F. La salud, en emergencia ¿Qué
medidas proponen los candidatos para arreglar un sistema
quebrado? Buenos Aires; La Nación, 6 de septiembre de 2023
Disponible en
https://www.lanacion.com.ar/sociedad/la-salud-en-emergencia-que-medida-proponen-los-candidatos-para-arreglar-un-sistema-quebrado-nid06092023/#/
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