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El Día de la Victoria en Europa fue el 8 de mayo de 1945, fecha
en la que los Aliados de la Segunda Guerra Mundial aceptaron la
rendición incondicional de la Alemania nazi y por tanto, la
derrota de las Potencias del Eje en el teatro europeo de
operaciones.
La rendición definitiva alemana fue firmada por el coronel
general Alfred Jodl en Berlín, después de que fuera autorizado
por Karl Dönitz, sucesor del Canciller.
El Acta de rendición militar se firmó en el Cuartel General de
Dwight D. Eisenhower, Comandante Supremo Aliado en Europa, el 7
de mayo en Reims/Francia y el 8 de mayo el mariscal alemán
Wilhelm Keitel firmó la rendición incondicional de la Wehrmacht
en la sede militar de la Unión Soviética en “Karlshorst”, Berlín
/Alemania.
Pero ¿cómo comenzó esta tragedia donde murieron 50 millones de
seres humanos?
El ascenso de Adolf Hitler al poder comenzó en septiembre de
1919 en Alemania cuando se unió al partido político conocido
como Deutsche Arbeiterpartei, DAP, el Partido Obrero Alemán.
En 1920 cambió su nombre a Nationalsozialistische Deutsche
Arbeiterpartei (NSDAP), Partido Nacionalsocialista Obrero
Alemán, comúnmente denominado Partido Nazi.

Este partido político se formó y desarrolló durante la posguerra
de la Primera Guerra Mundial, como partido antimarxista y
opuesto al Tratado de Versalles y al gobierno democrático de
posguerra de la República de Weimar.
Defendía el nacionalismo extremo y el pangermanismo, así como el
antisemitismo y la xenofobia al diferente o al que pensaba
distinto. Puede considerarse que el “ascenso” de Hitler terminó
en marzo de 1933, después de que el Reichstag adoptara la Ley de
Concesión de Plenos Poderes de 1933.
El 30 de enero de 1933 el presidente Paul von Hindenburg había
nombrado a
Hitler canciller tras una serie de elecciones parlamentarias y
las consiguientes intrigas entre bastidores.
La ley de plenos poderes -si se aplicaba de forma despiadada y
autoritaria- daba virtualmente a Hitler la capacidad de ejercer
constitucionalmente a partir de ese momento un poder dictatorial
y sin objeciones legales. (1)
Algunos confunden la llegada de Hitler al poder con un proceso
eleccionario.
La realidad es que una elite política y económica calificada
como liberal autoritaria (2) aprovechándose del sentimiento
generado por el Pacto de Versalles de la Primera Guerra Mundial
y sobre todo con miedo al socialismo en boga en esa época en
Alemania, posibilitó el apoyo material y político para el
ascenso de Hitler al Poder. (3)
Además, creían que sería fácilmente controlable el gobierno nazi
por esos poderes económicos poderosísimos.
Obviamente no sucedió... resulto incontrolable...
Este prólogo a mi artículo sirve para demostrar que la lógica no
existe en la vida de los pueblos. Hoy asistimos a una
preponderancia de gobiernos de extrema derecha en varias
regiones del orbe incluido nuestro país.
La era del capitalismo financiarizado es la nueva estrategia del
neoliberalismo, dónde la producción de bienes se reemplaza por
el capital líquido mismo. Todo está mercantilizado y se compra o
se vende. Pone la economía por sobre lo social.
Lo problemático en el contenido de esta cultura mundial naciente
es su carácter político. Mientras que el movimiento, en el
sentido tecnológico y de racionalidad organizadora, presenta
gran uniformidad en todo el mundo, la dirección del cambio
político es menos clara.
El problema central de la ciencia política consistía en saber
cuál podía ser el contenido de una nueva cultura mundial,
afirmando que en los sistemas relativamente más estables había
altos niveles de tolerancia y participación.
¿Cuál era, entonces, la relación idílica para la estabilidad
democrática? La tolerancia.
Y hoy, que la democracia aún no tiene claras sus formas, la
ausencia de tolerancia es una de sus nuevas marcas. Una espiral
de actos de visibilidad desastrosa, con falsas consignas que
legitiman la violencia en el trato del día a día. El debate
mediático ya está sucediendo desde estas formas.
¿Y si se transforma en los ámbitos laborales, educativos,
recreativos? ¿Si se transforma en la convivencia cotidiana dónde
alguien tenga derecho a la agresión ilimitada frente a otros
sólo porque algo haga distinto, o piense distinto o sea
diferente?
Este proceso de descomposición política y económica comienza en
los 80 con Reagan y Thatcher y fue una contrarrevolución
conservadora. Se oponía al Estado de Bienestar exitosísimo en
Europa, con algunos momentos sucediendo en espejo en nuestra
Sudamérica.
La Argentina era un país con una clase media en crecimiento
continuo, no solo en cantidad de población sino en cuanto a
ganancia en derechos sociales, una distribución de la renta
nacional per cápita que fue ejemplo en nuestro continente además
de una espiral ascendente en la escala social nunca vista en
otros países del continente.
Hoy asistimos a un renacer de esas doctrinas que preconizan la
desigualdad en nombre de una libertad mentirosa, en algunos
países, como el nuestro, pero con algunas diferencias: es un
final de ciclo.
La gente es cada vez más pobre, el mundo es cada vez menos
sostenible y la hiperconcentración de la riqueza en pocos es
cada vez más evidente.
Por esto el fin de ciclo del neoconservadurismo se presenta tan
violento.
Las mismas élites irresponsables que llevaron al poder a los
gobiernos de derecha en el pasado y contemporáneamente, hoy
producen el fenómeno de descivilización, atacando lo
democrático, lo jurídico y sobre todo lo institucional y
aumentando la desigualdad. (4)
Parecería ser que la triada de la Revolución Francesa de
Libertad, Igualdad y Fraternidad que nos legó después el
Iluminismo durante el siglo IXX, se deteriora cada día. (5)
¿Qué tiene que ver todo esto con la salud y sobre todo con
nuestro sistema de salud?
En este final de ciclo se advierte el final de 80 años de
multilateralismo.
Las Organizaciones como las Naciones Unidas creada por la
necesidad ante el horror de las guerras y tragedias suscitadas
en el Siglo XX y con la adhesión de decenas de otros países
firman la Carta de San Francisco y anuncian al mundo para
posibilitar la unión, la mejora en los sistemas democráticos y
sobre todo el control de los conflictos.
Se crearon agencias como la OMS que inicialmente fue organizada
por el Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas,
impulsando la redacción de los primeros estatutos. La primera
reunión de esta organización tuvo lugar en Ginebra / Suiza en
1948.
Ahora todo parece desaparecer… nuestro país renuncia a la OMS,
en un marco de dependencia y genuflexión nunca vistos.
¿Y qué pasa con la situación del mundo antes descripto con
nuestro sistema de salud? Parece que la Secretaría de Salud es
un ente fantasma que no comunica casi nada. No sabemos cuáles
son las políticas por realizar. ¿Cuál es el plan de salud si es
que lo hay?
Se crea una supuesta Agencia de Evaluación Tecnológica que se
superpone a otras dos. No sabemos quiénes la conformarán, ni su
marco legal de influencia, ¿qué controlará?, ¿qué pasará con la
ANMAT?, etc.
Y quizás lo más importante: ¿esas nuevas tecnologías y/o
medicamentos para que sector de la población serán? Las
diferencias entre los sectores más pudientes y el resto son cada
vez más marcadas.
De los problemas del sistema no se habla nada. Cada vez se
achican más las prestaciones por las dificultades económicas
generales de los financiadores sobrecargando los flacos
bolsillos de los beneficiarios.
Hemos enumerado en artículos anteriores un menú de problemas
tales como el pluriempleo del equipo de salud, salarios a la
baja, falta de personal, distribución geográfica de las
prestaciones irregulares e injustas, desigualdades manifiestas,
etc.
Por respeto al pueblo argentino tenemos el derecho
constitucional de saber qué pasará con el sistema de salud y
sobre todo... ser parte del proyecto.
Bibliografía:
1) La Segunda Guerra Mundial/Winston S. Churchill/Edit. El
Ateneo/2009.
2) Liberalismo Autoritario/Herman Heller/Alemania/1932.
https://dialnet.unirioja.es/servlet/artículo
3) Les irresponsables… qui a porté Hitler au pouvoir ? Johann
Chapotout/Alianza Editorial/ Suisse/2025.
4) La cultura cívica Gabriel Almond y Sidney Verba/
https://cambiocultural.org/cultura-politica/cultura-civica/
5) Robert Paxton - Carpetas Docentes de Historia/Harvard
University Press/1962
| (*) Docente Libre/Dto. De Salud
Pública y Humanidades Medicas/Fac. de Medicina /UBA. |
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