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En
conferencia de prensa, junto con el Dr. Mario Castelli,
asesor de la COFA, los farmacéuticos describieron las
amplias funciones que tiene la farmacia española y
aseguraron que en ese país no existe un mercado ilegal de
medicamentos porque todos los fármacos, incluso los de venta
libre, sólo pueden dispensarse en las farmacias.
Por su parte, el Dr. Castelli planteó la necesidad de un
sistema de trazabilidad para evitar las falsificaciones y
adulteraciones.
“El farmacéutico español ha apostado decididamente por el
medicamento genérico”, afirma el Dr. Pedro Capilla. Hemos
llegado a hacer comprender, a la opinión pública que entre
dos medicamentos iguales por qué habría de pagar el más
caro. Y no se trata de altruismo, sino de honestidad
profesional.”
-¿El Estado español garantiza la calidad de todos los
genéricos?
Dr. Capilla: -Por supuesto.
Dra. Carmen Peña: -Nosotros a priori no podemos dudar
porque tenemos una Agencia de Evaluación de Medicamentos que
está en contacto con la Agencia Europea, y tenemos una
agencia que revisa registro a registro todo lo que va
entrando como medicamento genérico. Y, en España, por
cierto, no hay mercado ilegal de medicamentos. Allí hay un
gran control del medicamento.
-Acá todavía hay un signo de pregunta respecto de si
todos los fabricantes cumplen con los estándares de calidad
requeridos…
Dr. Capilla: -No, allí está garantizada desde el momento
en que se sancionó la Ley de Garantías y Uso Racional de los
Medicamentos y Productos Sanitarios, el 26 de julio del año
pasado, que además de asegurar la calidad, seguridad y
eficacia, es consciente al decir que todo medicamento tiene
que estar en la farmacia.
Dra. Carmen Peña: -La Administración tiene que velar
por el medicamento registrado. Porque no es un problema del
genérico sino de la administración que lo registra.
-¿Cuál es su opinión respecto de la cultura de la
automedicación?
Dr. Capilla: -A esto hay que añadirle “automedicación
responsable” de medicamentos sin receta. Un resfrío no es
como para recurrir al médico o un laxante para un
estreñimiento puntual o una mala digestión, por tanto esa
automedicación, en España, está en manos del farmacéutico
porque está capacitado para dar consejo en esa dispensación
y si la sintomatología es más seria, aconseja ir al médico.
-¿Usted cree que tendrían que haber precios de referencia
para bajar el costo de los medicamentos en aquellos países
donde está desregulado?
-Realmente se hace con esa finalidad. En mi país, el precio
de referencia se hace a través de una complicada fórmula
entre un grupo terapéutico específico y entonces se
determina un precio que no constituye una baja radical, pero
a través del cual entran en el Sistema Nacional de Salud y
por encima de éste no entran en el sistema. Cuando en España
un medicamento está por encima del precio de referencia y un
médico lo prescribe, el farmacéutico obligatoriamente tiene
que sustituirlo por un medicamento que se halle por debajo
del precio de referencia y si es posible, que sea genérico,
obviamente informándoselo al paciente.
-¿Cómo se llega al uso racional de medicamentos?
-Hay que educar al farmacéutico, al médico y a la población.
Es un equilibrio entre la responsabilidad profesional del
farmacéutico, del médico y también del ciudadano de no
presionar. En realidad es responsabilidad de toda la
sociedad.
Por otra parte, en cuanto a lo que atañe a los
farmacéuticos, las sanciones para quienes dispensan
medicamentos bajo receta sin receta son altísimas. Pueden
llegar a 30.000 euros.
-¿Qué sucede en el caso de los medicamentos que se
comercializan a través de internet?
Dra. Carmen Peña: -El delito existe y existirá. Las
administraciones no deben cometer irregularidades sacando
los medicamentos sin receta a los anaqueles de los
supermercados. En España, la nueva ley del medicamento
recoge la figura del medicamento en internet y
específicamente dice que se podrá acceder a los fármacos a
través de esa vía pero siempre desde una farmacia física con
la figura del farmacéutico responsable al frente, que pone
su título, que se responsabiliza de que ese medicamento vaya
en condiciones adecuadas, de tal forma que se introducen las
nuevas tecnologías, pero salvaguardando la salud del
paciente.
Dr. Capilla: -Lo que tenemos que hacer es
sensibilizar a la población para que llegue a la conclusión
de que bajo ningún pretexto utilice un medicamento del que
no sepa claramente su procedencia. En internet ya se han
detectado miles de falsificaciones.
-¿Qué medidas concretas se deberían implementar en la
Argentina para evitar la adulteración o falsificación?
Dr. Castelli: -En un país con escaso poder de policía
sanitaria como la Argentina, en el que el mismo Estado nos
dice que hay 30 millones de cajas ilegítimas, si el Estado
exigiera que el medicamento estuviera solamente en la
farmacia, los lugares donde los delincuentes tendrían que
colocar sus productos serían 12 o 13.000 establecimientos.
En la situación actual, por ejemplo en la Capital Federal,
donde se pueden vender medicamentos fuera de la farmacia, la
posibilidad es de un millón de bocas. Por eso nosotros
estamos impulsando la necesidad de crear un sistema que
garantice la trazabilidad. Ese sistema es una estampilla
fiscal. Acá directamente roban “a la carta”, teniendo ya
pedidos los productos. Una estampilla que puede ser hecha
hoy en papel o electrónica. El INAME tiene diseñada una
estampilla fiscal desde el año 97 con cuatro controles: para
el paciente, para el farmacéutico y dos controles para el
Estado. Es decir que si no se hace, es porque no se quiere
hacer. ¿A quién se está favoreciendo no estableciendo esta
estampilla? ¿Quiénes son los que se oponen a la estampilla
fiscal?
-¿Quiénes cree ud. que se oponen?
-Evidentemente alguien que no quiere que le controlen la
producción. Porque cada laboratorio tiene que comprar la
cantidad de estampillas que corresponden a un lote
determinado y ese lote tiene un camino legal desde que sale
del laboratorio hasta que llega al paciente. Ahora, si hay
mercado negro, si hay partidas mellizas, delincuentes que
roban y que colocan rápidamente los productos…
La estampilla es una vieja propuesta de los farmacéuticos.
Lamentablemente pasaron distintos gobiernos y nadie se
decidió a implementarla. Por ejemplo, las ligas de
consumidores nunca han querido ocuparse de este tema.
La trazabilidad va a llegar, pero cuando sea un reclamo de
toda la sociedad.
-¿Qué gestión sería necesaria para esto?
Dr. Castelli: -Simplemente una resolución del Ministerio
de Salud.
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