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Las enfermedades financieramente catastróficas
constituyen una fuente creciente de preocupación en
aquellos sistemas de salud parciales y fragmentados.
Las enfermedades catastróficas pueden definirse desde la
bibliografía especializada como aquellas que tienen:
a) bajo impacto sobre la carga de enfermedad (incidencia
baja y el tratamiento en muchos casos es paliativo dado
que no existe alternativa de curación).
b) alto costo de los tratamientos por que requieren
intervenciones de alto costo en algunos casos y en otros
requieren tratamientos repetitivos y prolongados en el
tiempo (cáncer, cardiovasculares, accidentes
cerebrovasculares, enfermedades mentales,
discapacidades, etc.). 1
c) generan severos daños en la salud y la economía
familiar de quien las padece.
d) Una parte importante de los gastos están destinados a
medicamentos.
Las enfermedades raras son un grupo de patologías que
afectan a un número reducido de personas, 1 cada 2.000
habitantes.2 En países con cobertura universal e
integral el pool de riesgo (toda la población del país)
permite compensar los riesgos individuales con los
colectivos. En los sistemas mixtos donde conviven
público, privado y seguridad social los fondos
aseguradores que tienen una escasa cantidad de afiliados
no pueden manejar los riesgos. Por ejemplo una familia
hemofílica rompería el equilibrio actuarial existente.
El cáncer se fue convirtiendo en la principal causa de
muerte en el mundo, superando las dolencias cardíacas y
matando más gente que el Hiv-Sida, malaria y
tuberculosis juntas. En el año 2030 el mundo tendrá 27
millones de enfermos y estará obligado a sepultar 17
millones de personas por año afectados por esta
dolencia.3 Los especialistas plantean que el cáncer será
en breve una epidemia. El paciente crónico complejo y/o
frágil supone un 5% de la población y consume el 65% de
la totalidad de recursos sanitarios”.4
Como bien señala Federico Tobar 5 “los países que
lograron un modelo universal y único de protección
social en salud, las catastróficas sólo presentan el
desafío de una evaluación tecnológica adecuada y de
protocolización de los tratamientos para lograr que los
pacientes tengan respuestas homogéneas en calidad”.
Como bien es sabido en la Argentina convivimos con un
esquema de cobertura fragmentado que genera serios
problemas a los fondos de enfermedad al no poder
alcanzar un pool de riesgo de equilibrio donde los
riesgos buenos primen sobre los malos. Cuando el riesgo
se divide en millones de beneficiarios no hay pacientes
caros. Por ejemplo tratar a un paciente con Enfermedad
de Gaucher puede costar más de u$s 300.000 dólares al
año, esto compromete a un fondo pequeño pero resulta
insignificante repartido entre 40 millones de
habitantes. 6
La fragmentación política e institucional conduce a una
situación de mercado, donde cada asegurador intenta
resolver las necesidades de su población en forma
individual sin contar con mecanismos solidarios e
institucionales.
Las obras sociales sindicales y empresariales a partir
del decreto 1615/1996 tienen un instrumento que es la
Administración de Programas Especiales, cuya competencia
y financiamiento se extraen de la Superintendencia de
Servicios de Salud. Fue creado con el objetivo de
descargar a las OO.SS. (fondos de enfermedad) de
aquellas patologías menos frecuentes y más costosas pero
ha carecido durante todos estos años de una gestión
técnica sólida en el campo de lo actuarial y médico
además de los problemas consabidos de transparencia en
la asignación de recursos. Financiar prestaciones y/o
tratamientos farmacológicos en base a historias clínicas
inexistentes es un hecho muy grave que muestra los
problemas de ausencia de controles y sanciones.
Por otra parte y en lo que constituye el mayor fondo de
enfermedad del país, el INSSJP quien tiene a su cargo
4,2 millones de personas y cuenta con un nivel de
ingresos (más de 15.000 millones de pesos anuales) que
le permiten un mayor margen de maniobra para financiar
prestaciones especiales incluso para darse el lujo de
financiar en forma irracional determinadas prestaciones
no siempre costo-efectivas.
Las obras sociales provinciales que están financiadas
por los gobiernos provinciales y los empleados públicos
se encuentran ante una variedad de casos de diversa
dificultad, aquellas más pequeñas no pueden cubrir con
los recursos y los gobiernos tienen que financiar o bien
recurrir a mecanismos como la lotería provincial para
poder realizar trasplantes y otras prestaciones
complejas. Las más grandes tienen un margen mayor no
obstante están buscando alternativas que les permitan
compensar riesgos y coberturas ampliadas. Durante el año
2005 una obra social provincial con aproximadamente
450.000 personas beneficiarias de las cuales sólo 12.000
de ellos gastaban el 36% del total de los recursos.
Desde la Presidencia de la COSSPRA se intenta avanzar en
el dictado de una ley nacional que encuadre como
políticas públicas a ciertas enfermedades de baja
incidencia y alto costo. 7
La demanda de salud (tecnologías y medicamentos) no
puede ser dejada en libertad de albedrío para que se
coordine en forma espontánea por proveedores y
pacientes. La asimetría informativa y los incentivos mal
ubicados terminarán descargando sobre los fondos de
enfermedad los mayores costos por comportamientos
oportunistas del prestador y/o del paciente. La ausencia
de criterios de regulación y una interpretación sin
límites del derecho a la salud abierto con la reforma
constitucional de 1994, están impactando progresivamente
en el gasto sanitario.
Los seguros requieren programas de seguimiento de los
pacientes más riesgosos (diabéticos, hemofílicos,
fibroquísticos, etc.) con un sistema de alertas para el
mantenimiento de la salud. Identificar grupos de riesgo
que son los que requieren más presupuestos y que están
sujetos a prescripciones y tratamientos no siempre costo
efectivos. Los nuevos modelos de gestión de la
enfermedad sin embargo no pueden controlar ni reducir el
impacto de enfermedades catastróficas o de baja
incidencia que se ven beneficiadas por los desarrollos
de la biotecnología y la medicina genómica.
La Argentina como consecuencia de la alta inflación y de
la inseguridad jurídica que ya arrastra varios años no
tiene un desarrollo del sistema de seguros y reaseguros
de salud.
El reaseguro constituye un esquema de superposición de
la protección de los riesgos otorgando mayor estabilidad
y solvencia al asegurador, que es quien, frente a sus
beneficiarios asegurados, tiene la obligación de asumir
el coste de las reclamaciones por eventos cubiertos por
la cobertura legal. En los últimos tiempos asistimos
también a un proceso de judicialización de la medicina
como consecuencia de no haber sometido al Programa
Médico Obligatorio a un debate más técnico, más amplio y
analizando la sustentabilidad de lo financiero y costo
efectividad de las prestaciones que allí se incluyen.
Con el Reaseguro se tiende a homogeneizar los valores
asegurados y se limitan las responsabilidades asumidas,
con lo que se permite el control de la frecuencia de
siniestros (probabilidad de ocurrencia), de la
intensidad del siniestro (alcance) y de su importe
(cuantía), todo lo cual favorece una mayor capacidad y
oferta de seguros para poder asumir un mayor espectro de
riesgos. En términos sencillos y entendibles podríamos
definir al reaseguro como "el seguro del seguro". En el
caso de la cobertura de salud que nos ocupa intentaré
explicar cómo funciona un reaseguro de un plan de salud.
Se trata de un contrato que suscribe la empresa
aseguradora de salud con otra compañía (la reaseguradora),
para que cubra parte (o la totalidad) del coste de
determinados siniestros de muy baja incidencia pero con
un alto costo particular. Es la manera que tienen las
entidades aseguradores de asumir riesgos más elevados,
como los que se van a ir presentando cada vez con mayor
frecuencia considerando los desarrollos científicos
tecnológicos en el área de la medicina, en particular el
avance de la biotecnológica, la genómica, la
nanotecnología y la informática aplicada a resolver
problemas de salud muy complejos.
Los fondos de enfermedad (prepagas y obras sociales) han
construido sus empresas sobre la base de un paradigma
que comienza a tener serios problemas. Asegurar a
personas sanas, jóvenes y brindar la prestación cuando
la misma es solicitada o reclamada por el asociado
correspondiente. Son muy extraños y limitados los casos
de aseguradoras que gestionan la salud de la población,
que trabajan en prevención, en educación para salud y
promoción y que se anticipan a la enfermedad.
Más allá de las prevenciones respecto del incremento de
los costos por innovaciones tecnológicas, reclamos
judiciales y mayor demanda de los pacientes me permito
ser optimista respecto a que en los próximos años
asistiremos al desarrollo de instrumentos de reaseguros
que permitan gestionar el riesgo sanitario en forma
sustentable y superar este serio inconveniente que
comienza a impactar cada vez más en las asignaciones
presupuestarias de los fondos de enfermedad. La
población sana que es la que menos demanda comenzará a
tener dificultades para “mantener” su salud si los
fondos no toman medidas con premura.
El camino de la racionalidad implica buscar instrumentos
que permitan agrupar los riesgos de la población y
diluirlos evitando los riesgos de seguir administrando
en forma dispersa y fragmentada.
1-Propuesta para un sistema de Cobertura de Enfermedades
catastróficas en Argentina. Jorge Colina. Fundación
MAPFRE Estudios de Madrid.
2-Enfermedades raras: la organización disminuye la
complejidad y mejora resultados Carlos Vassallo y
Esteban Lifschitz. 3-Estas son conclusiones del Informe
2008 World Cancer Report divulgado por la Organización
Mundial de la Salud.
4-Son los datos que aportó David Baulenas, director
médico del Consorcio Hospitalario de Mollet del Vallès,
a la mesa de debate sobre colaboración interprofesional
en el entorno sanitario, celebrada en Barcelona en el
marco del Congreso Europeo de Farmacia, Infarma 2011.
5-¿Qué aprendimos de las reformas de salud? Evidencias
de las experiencias internacionales y propuestas para
Argentina. Federico Tobar. Fundación Sanatorio Guemes.
2010.
6-Idem cita 5
7-Los nuevos paradigmas de las obra sociales
provinciales. Declaraciones del Dr. Antonio La Scaleia.
Presidente COSSPRA. Baires Salud.
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