|
Estimación del gasto necesario para garantizar
la canasta asistencial del PMO
INTRODUCCION
A
principios de marzo de 2010 presentamos el primer trabajo
relativo a la ESTIMACION DEL GASTO NECESARIO PARA GARANTIZAR
LA COBERTURA ASISTENCIAL CONTENIDA EN EL PMO.
En esa presentación explicamos que era nuestra intención
realizar una serie de investigaciones del campo de la salud
de la Argentina, tendientes a volcar información al sector
para la toma de decisiones.
El Programa Médico Obligatorio (PMO) comprende un listado de
prestaciones que deben ser brindadas obligatoriamente por la
Seguridad Social, y por los Seguros Privados y que son
consideradas también, como medida de cobertura, en la Obras
Sociales Provinciales y en el sector público al elaborarse
los diferentes programas asistenciales.
El objetivo de esta presentación es actualizar el valor del
PMO a abril de 2012 manteniendo la misma metodología
descripta y discutida en el primer trabajo, o sea tomando
como parámetros los indicadores de uso y los precios de
mercado, metodología que ha sido la aplicada en general en
trabajos precedentes, y sobre la cual hemos recabado
opiniones a diferentes actores del sector que la han
aprobado sin objeciones, considerándola como la mejor a
emplear con la información disponible en nuestro país.
Hemos analizado el origen de las variaciones observadas
entre cada actualización realizada.
Se han construido las tasas de utilización de los servicios
listados en el PMO a partir de una población cuyas
características han sido ya descriptas y que se han
mantenido en las sucesivas versiones.
Para considerar un costo real del PMO, deberían tenerse en
cuenta algunas otras erogaciones, tales como los costos de
administración central.
Esa estimación todavía nos ha sido imposible de justipreciar
adecuadamente, debido a la heterogeneidad de información
recibida por parte de los agentes de salud.

En
este trabajo hemos mantenido las tasas de uso que fueran
utilizadas en la actualización de febrero de 2011 , teniendo
en cuenta que en dicha oportunidad realizamos un
relevamiento de las mismas y produjimos algunas ligeras
modificaciones en los rubros medicamentos ambulatorios, en
radioterapia y en HIV.
Tal como ya hemos referido los indicadores son de cambios
muy paulatinos acompañando a las modificaciones
epidemiológicas, de accesibilidad, tecnológicas, etc.
Los precios de mercado considerados los hemos actualizado a
fines de abril de 2012, debiendo destacarse que los valores
obtenidos como producto final se han ido modificado en mucho
por encima de la inflación informada por el INDEC.
Como en la anterior actualización no todas las diferentes
prestaciones lo han hecho en forma similar, ha sido desigual
el incremento de valores de unas respecto a otras, situación
que analizamos a posteriori.
Como persiste un fuerte proceso inflacionario, seguramente
los precios considerados son válidos para la fecha de corte,
pero se van modificando con el paso del tiempo.
De cualquier forma y tal como lo expresáramos en el primer
trabajo, la matriz elaborada por nosotros y los indicadores
usados permiten actualizar los precios de cada ítem
modificando los valores finales del PMO y actualizándolos al
momento deseado.
MATERIAL Y METODOS
La metodología utilizada en el presente estudio sigue los
mismos lineamientos de los estudios anteriores.
La población considerada ha sido la menor a 65 años.
Las tasas de utilización de las diferentes prestaciones,
describen el comportamiento promedio de la población bajo
estudio.
Los valores considerados son aquellos pagados a los
prestadores por las diferentes entidades consultadas y
aquellos recabados directamente.
Hemos usado la misma matriz de costos de los trabajos
anteriores.
Estimamos el gasto promedio (1) por beneficiario, menor de
65 años, que garantice el acceso a las prestaciones
incluidas en el PMO a partir de los estudios realizados de
tasas de utilización registradas y precios de mercado.
TASAS DE USO Y PRECIOS
Las tasas de uso que han sido reanalizadas en 2011 se han
mantenido sin modificaciones.
Los valores considerados como precios de las prestaciones
son aquellos recabados en el mercado a fines de abril de
2012, por lo que al analizar los resultados la totalidad de
los aumentos está justificada por la modificación de los
precios de los diferentes ítems de la grilla utilizada.
OTROS
A los fines de una mejor comprensión se vuelve a incorporar
una tabla (Tabla N° 1) con la composición según edad y sexo
de la población estudiada, cuyos orígenes han sido
descriptos en las actualizaciones anteriores.
Los indicadores y precios corresponden a poblaciones de
Ciudad de Buenos Aires y conurbano bonaerense, por lo que
entendemos y reiteramos que los indicadores y valores son
aplicables sobre todo a grandes conglomerados urbanos.
RESULTADOS
El costo total sin considerar los gastos de administración
es de $191,57 (ciento noventa y un pesos con cincuenta y
siete centavos).
Este valor comparado con el resultado obtenido en febrero de
2011 ($147,54) implica un incremento en catorce meses de un
29,8 %.
El gráfico n° 1 compara los valores estimados del PMO de las
actuaciones realizadas en 2010, 2011 y 2012.
Este
incremento supera nuevamente como ocurriera en la
actualización de 2011 los aumentos de costo de vida
informados tanto por el INDEC (2) y también aquellos
emanados de consultoras privadas (3).
En el gráfico n° 2 se compara la inflación oficial, la de
consultoras privadas y los incrementos de costos del PMO
entre febrero 2010 a febrero 2011 y entre febrero de 2011 y
abril de 2012.
Lo financiado por el seguro social, respecto al gasto de
bolsillo se ha incrementado porcentualmente.
Financiado por el Seguro Social $174,50 y $17,07 por el
bolsillo de los beneficiarios.
Si uno compara datos, en 2010 el gasto de bolsillo era de
$13,11 y representaba el 12,9% del total del PMO. En 2011
fue de $15 representando el 10,2% y en abril de 2012 $17,07
o sea el 8,9% del total.
Ese incremento se debe a que los coseguros siguen sin
modificarse y prácticamente el total del gasto de bolsillo
corresponde a medicamentos ambulatorios, que el afiliado
abona directamente en un porcentaje variable según el tipo
de medicamento.
En el gráfico n° 3 se observa los valores financiados por
los agentes de Salud y el gasto de bolsillo en febrero de
2010, en febrero de 2011 y en abril de 2012.
En
la tabla II se pueden observar los valores por grupos de
prestaciones en febrero de 2010 y febrero de 2011 y abril de
2012, surgiendo del análisis entre 2010 y 2011 llama la
atención por su mayor impacto el producido en las prácticas
con internación, con un aumento del 61,14%, en el período
2011 / 2012 el mayor incremento se ha dado en Programas
Preventivos con el 60,8%, seguido de Prestaciones
Ambulatorias con el 58,82%. El menor incremento ha sido en
prestaciones con Internación con un 25,52%.
Desde febrero de 2010 a abril de 2012 (veintiséis meses)
Programas Preventivos y Prestaciones Ambulatorias son los
que más se han incrementado (131 y 128% respectivamente)
mientras que prestaciones especiales 111% y Prestaciones con
Internación 102%.
El gasto de bolsillo lo ha hecho en sólo un 30% y lo
financiado por los agentes de salud en un 98%.
El gráfico n° 4 muestra la participación porcentual de cada
grupo de prestaciones en cada actualización realizada, y por
otro lado la participación relativa del financiamiento por
el Seguro Social y del Gasto de Bolsillo en las mismas
actualizaciones.
El gráfico n° 5 muestra la participación porcentual de cada
tipo de prestaciones en el subtotal que financia el Seguro
Social.
CONCLUSIONES:
Han pasado 26 meses desde que realizamos la primera
estimación.
La alta inflación se ha mantenido durante este período de
tiempo como variable sustancial. Si bien ha sido mayor para
todas las mediciones durante el lapso febrero de 2010 a
febrero de 2011, en este período de análisis (febrero de
2011 abril de 2012) ha sido de alrededor del 25%.
Respecto al valor estimado del PMO, nuevamente su incremento
ha superado las mediciones inflacionarias consideradas más
reales, girando alrededor del 30%.
Los grupos prestacionales que en la medición anterior se
habían rezagado, compensaron en la actual, manteniendo
porcentajes de participación bastante constantes.
En cada medición el porcentaje financiado por los Agentes de
Salud se va incrementando y hoy las Obra Sociales para
asegurar las prestaciones incorporadas al PMO deben contar,
con esta composición poblacional, con $174,50 por
beneficiario bajo cobertura.
El beneficiario en promedio aporta $17,07 por mes, número
que corresponde casi en exclusividad a medicamentos
ambulatorios (cuyo incremento de una medición a la otra fue
de alrededor de un 20%).
El financiamiento de las Obras Sociales tiene como fuente
principal de fondos los aportes de los trabajadores en
relación de dependencia y las contribuciones patronales.

Dichos ingresos, si bien se han modificado por las
paritarias durante el período, no alcanzan para cubrir este
incremento de costos, por lo que los Agentes de Salud tienen
en muchos casos serias dificultades para asegurar, con
calidad y oportunidad de acceso adecuadas, las prestaciones
contenidas en el PMO. Lo que en 2011 era un signo de alarma,
hoy es una realidad.
Si sumamos a ello la falta de giro de fondos propios que han
quedado retenidos por el Estado y la distribución
discrecional que hace el APE de fondos, que si bien se
encuentran en el presupuesto, son propios del sistema,
porque provienen de aportes y contribuciones, estamos ante
una situación sumamente compleja, que impacta aún más en
obras sociales de menores ingresos.
En momentos de serias dificultades de financiación, como
mecanismo para garantizar una cobertura asistencial con más
equidad entre los diferentes agentes, consideramos necesario
un análisis del Subsidio Automático Nominativo (SANO).
|