:: REVISTA MEDICOS | Medicina Global | La Revista de Salud y Calidad de Vida
 
Sumario
Institucional
Números Anteriores
Congresos
Opinión
Suscríbase a la Revista
Contáctenos

 


 

 

 

 

 

 

 

 

Federación Farmacéutica

 

 

 

 

 
 

 

:: Infórmese con REVISTA MEDICOS - Suscríbase llamando a los teléfonos (5411) 4362-2024 /  (5411) 4300-6119 ::
  

Columna


Ver para crear:
 
Observatorio Nacional de Salud

  "No ve el ojo sino la cultura" 
Franz Boas 
 

Por el Doctor Ignacio Katz

Ningún médico le indicaría medicación a un paciente sin previamente examinarlo, observar su cuerpo, palparlo, auscultarlo y evaluarlo con estudios complementarios. Sin embargo, las políticas sanitarias de nuestro país no cuentan con un Observatorio del cuerpo social para definir las medidas a tomar. Hoy por hoy, no poseemos registros fehacientes que vayan desde la cantidad de médicos, especialistas, técnicos y demás profesionales que existen en cada provincia, hasta cuántas instituciones de salud y de qué tipo operan en cada lugar. Tampoco sabemos qué clase de parque tecnológico poseemos ni en qué condiciones.
Únicamente a partir de un conocimiento riguroso de la múltiple realidad sanitaria del país en su conjunto y heterogeneidad será posible de trazar una estrategia sanitaria integral, diseñar un plan de salud desbrozado en programas concretos, georreferenciales y eslabonados en una red armónica a fin de potenciar un seguimiento pormenorizado a través del cual realizar estadísticas e identificar problemas. Esto se logra con un Observatorio Nacional de Salud (ONS).
La misión de proveer una atención de salud se basa en la visión del potencial vital para evaluar el conjunto de herramientas a utilizar, pero para ello se debe contar con datos que permitan generar información, entonces producir conocimiento para comprender, de esta manera discernir para poder decidir y finalmente planificar para gestionar. Los Observatorios de Salud se vienen imponiendo en cada vez más países en los últimos años, pues demuestran ser la manera más eficiente de conocer para intervenir, de ver para crear. En definitiva, el objetivo de un observatorio es relevar información para sistematizarla y analizarla, y así elaborar informes que sirvan a medidas concretas. Se trata de observar y reflexionar, conocer y comprender, e incluso prever y proponer.
Lo primero que hay que notar sobre el ONS es que integra, pero no reemplaza los resultados o las funciones de otros sistemas preexistentes de información, monitoreo y vigilancia (como la vigilancia epidemiológica y de salud pública, salas de situación de salud, análisis del sector salud, monitoreo y evaluación de sistemas y servicios de salud). Por el contrario, los Observatorios rara vez producen registros primarios, pero a partir de la integración de contenidos y funciones de esos sistemas, producen una visión panorámica de un modo integral, coherente y sólido.
El ONS cumpliría un rol de Agencia Sanitaria y debería ser un centro nacional de base virtual, que tenga el propósito de realizar observaciones integrales e informar en forma sistemática y continua sobre aspectos relevantes de la salud de la población y de los “sistemas de salud”. Los criterios básicos de su finalidad están dados por identificar a la población que abarca en su accionar, diferenciando la enferma de la vulnerable, y al mismo tiempo segmentándola según su biodiversidad, tecno-diversidad y aquellas otras diversidades que se encuentran en relación con las distintas regiones de procedencia.
Mediante una red informativa eficiente, y bajo la coordinación de la Autoridad Nacional y de los Gobiernos Provinciales (COFESA- CORESA- Unidad Ejecutora Provincial), en el marco de un gran Acuerdo Sanitario, pueden optimizarse los registros de pacientes, qué enfermedades prevalecen, cuántos son los tiempos de internación para cada dolencia, cómo son las listas de espera para las prácticas quirúrgicas. La ausencia de lo antedicho hace que los planes de salud se conviertan en deseos abstractos sin llegar al nivel de constituir una planificación estratégica, con el fin de lograr una programación concatenada, lógica, mediante una agenda precisa.
Un ONS también podría participar en construir un mapa sanitario regional veraz en términos de estructura sanitaria, de procesos y resultados. Para ello debe reunir, comparar, integrar y analizar información proveniente de los distintos efectores locales de salud, así como de los Colegios Médicos. De esta manera, posibilitaría la identificación de las brechas faltantes en la generación de información, monitorear las tendencias de la salud y la enfermedad, y señalar posibles áreas de acción prioritaria.
Vale remarcar que la fragmentación y dispersión socioeconómica y territorial de nuestro país debe encararse con una integración federal en red, e impone trabajar con economías de escala, es decir, crear regiones operativas de integración para la atención sanitaria, en vez de pretender una autosuficiencia provincial que está fuera de nuestro alcance económico, y que, aun siendo posible, significaría una ineficiente asignación de recursos.
La existencia del ONS promovería, además, una cultura de gestión, constituyendo una poderosa herramienta integrada para el apoyo de las acciones políticas concretas en salud pública y sistemas sanitarios, y que se plantearía como un espacio de integración en crecimiento que utiliza las nuevas tecnologías. En este sentido, suministraría el soporte técnico para mejorar la calidad de los indicadores, tanto los teóricos, referidos a los problemas a resolver, como los indicadores críticos, que son aquellos que nos señalan las alteraciones a evitar (nos hablan de perturbaciones preclínicas u omisiones en la detección de enfermedades).
En síntesis, el ONS implica las siguientes tareas:

a) recopilación, integración y almacenamiento de datos e información secundaria.
b) procesamiento de datos.
c) análisis estadístico.
d) análisis e interpretación integral de resultados en contexto.
e) desarrollo de informes y difusión de información y conocimiento.

Para lograr todo esto, el Observatorio debiera permanecer como una entidad virtual interconectada en red. Dada su naturaleza, funcional e interconectada, el Observatorio debe estar virtualmente enlazado a muchas instituciones y entidades públicas y privadas, mediante comunicación formal, informal y electrónica.
Un Observatorio así contribuiría a la preservación y al mejoramiento de la salud de la población, incluyendo la reducción de desigualdades, mediante las siguientes acciones:

generar análisis de situación de salud de base poblacional con una orientación hacia los determinantes de la salud.
orientación a trabajar con agentes locales o regionales para tomar actuaciones basadas en la evidencia y teniendo como base la información aportada.
análisis de los datos e interpretación de los mismos (por ejemplo, análisis e interpretación de las desigualdades sociales en mortalidad).

En resumen, el ONS contribuiría a mejorar la calidad y la eficiencia de los servicios sanitarios a partir de la integración de los sistemas existentes de información, monitoreo y vigilancia, produciendo una visión panorámica, coherente y sólida. Además de recolectar datos desarrollaría y aplicaría herramientas, capacitaría recursos humanos y difundiría reportes y recomendaciones. Por último, incidiría gradual y eficazmente en la elaboración de políticas públicas para el campo sanitario.

Director Académico de la Especialización en Gestión Estratégica de Organizaciones de Salud Universidad Nacional del Centro (UNICEN).
Autor de: “Salud y Políticas públicas” (UNICEN 2016)
 

SUMARIO
 

 

Copyright 2000-2016 - Todos los derechos reservados, Revista Médicos