|
Atravesados por la
actual situación económica que vemos
en la agenda política nacional,
desde la Asociación de Médicos
Municipales venimos trabajando de
manera clara y precisa en dos temas
que son de vital importancia, uno es
el tema paritarias donde somos
optimistas en alcanzar un acuerdo
que satisfaga las necesidades de los
profesionales de la salud, y en otro
sentido nos hemos puesto a la cabeza
de los reclamos por el tema
impositivo.
Al respecto la AMM les reclamó a los
diputados de la Nación
modificaciones en la ley del
Impuesto a las ganancias, ya que
consideramos que el actual sistema
vigente desde hace más de tres
lustros afecta en forma cuasi
confiscatoria a la gran mayoría de
la base asociativa representada por
esta entidad sindical.
Además, también pedimos que las
modificaciones que se tendrían que
llevar adelante en la ley de
Impuesto a las Ganancias, contemplen
la reformulación de las escalas
progresivas de ingresos sobre la
cual se aplica el impuesto, y la
elevación del mínimo no imponible a
remuneraciones mensuales, cuyo monto
debería meritarse en función de la
evolución de precios registrada, y
que en todos los supuestos deberían
exceder los montos hoy vigentes.
La presentación tuvo como objetivo
hacer conocer la inquietud de un
sector representativo del trabajo
profesional de la Ciudad de Buenos
Aires, al que representamos y que
involucra a más de diez mil
profesionales médicos que por la
propia naturaleza de la cualidad
universitaria de sus tareas se
encuentra afectado en casi su
totalidad por el impuesto que se
pretende sea modificado, y de esa
manera lograr una justa solución a
la problemática impositiva
planteada, que tendrá efectos
positivos sobre un servicio de salud
de referencia, proyección y alcance
nacional, del cual nuestros
afiliados y representados son la
piedra angular y sustento principal
del sistema.
A este complejo panorama que
presenta el impuesto a las ganancias
se le suma el incremento
inflacionario que golpea
directamente sobre la economía
diaria de todos los trabajadores de
la salud. Sin dejar de lado que
estos dos elementos se conjugan y
forman un escenario muy delicado
donde la negociación paritaria se
encuentra en un empantanamiento que
demuestra la falta de determinación
en las prioridades hospitalarias y
en las propias políticas públicas de
salud que debe llevar adelante el
Gobierno de la Ciudad de Buenos.
Otro tema importante es el de los
nombramientos. Es difícil comprender
la falta de acciones expeditivas en
una situación tan urgente. No
podemos seguir esperando decisiones
administrativas que sólo
obstaculizan y frenan la verdadera
posibilidad de contar con el recurso
humano necesario. Es indispensable
que los responsables entiendan que
esto afecta no sólo a los
profesionales que concursaron, sino
que impacta directamente en la salud
de los pacientes, dado que sin
médicos no puede haber salud
pública. Esperamos que quede claro
que lo que pedimos es orden y
agilidad en las decisiones que se
toman, y que no se trata de dinero,
ya que para eso están las
paritarias. También es vital que se
implemente una política específica
para las especialidades críticas,
porque cuando falten neonatólogos,
anestesiólogos, terapistas,
obstetras o psiquiatras, habremos
llegado tarde a la problemática. Es
trascendente hacerlo ahora para
poder desarrollar una estrategia
coherente con el momento que vive la
salud pública.
El desarrollo que se hizo con el
SAME, llevándolo a varios puntos del
conurbano, y replicando la gran
tarea que se realiza en la ciudad,
es un hecho que debemos destacar y
vamos a seguir colaborando para que
la calidad de este servicio se
repita en todo el país, porque todos
los argentinos merecen recibir una
atención médica de primer nivel ante
las urgencias. Pero para que eso
ocurra es necesario que el SAME
cuente con el recurso humano
necesario, con los nombramientos que
lleguen en tiempo y forma para poder
cubrir la enorme tarea que realizan
los colegas los 365 días del año y
que se vio en los últimos días
acentuadas y elogiadas por la tarea
cumplida en la campaña contra el
dengue y en la tragedia de la fiesta
electrónica de Costa Salguero donde
fue el sistema de salud que una vez
más respondió de manera adecuada.
Por eso entendemos, que ha llegado
el momento de que los que están al
mando del gobierno entiendan que sin
médicos no hay salud pública. Esta
Asociación, que el 20 de mayo cumple
80 años de vida, no bajará ninguna
de sus banderas, porque así lo marca
su historia, llena de luchas y
conquistas, siempre defendiendo al
médico en pos de una salud pública
universal, de calidad y de libre
acceso
|